«Los controles positivos antidopaje son malos para el negocio»

«Creo que probablemente el 80% de los atletas de élite, quizás más, usan sustancias dopantes». Las palabras de Victor Conte sobre el dopaje siempre hacen tambalear a creyentes y agnósticos del deporte limpio porque él fue quien dirigió el laboratorio Balco en las cercanías de San Francisco que se convirtió en el origen del mayor escándalo de dopaje en Estados Unidos que terminó con la reputación y las carreras deportivas de los atletas Tim Montgomery, Dwain Chambers y la cinco veces campeona olímpica Marion Jones, así como de otros deportistas destacados como los jugadores de béisbol baseball Barry Bonds y Jason Giambi.

La opinión del hombre que popularizó la prohibida THG en el deporte sobre el último informe sobre el presunto dopaje de la televisión alemana ARD y el diario británico Sunday Times sobre el atletismo no ha tardado en aprovechar la actualidad para insistir en el tema. «Muchos, muchos, muchos controles positivos por dopaje se han cubierto durante años. Personalmente sabía que habían sido tapados. La razón es... Que es un mal negocio», declaró Conte a la agencia Reuters. «Hay un conflicto de intereses financiero. Esas pruebas son malas para el negocio», razonó el gurú del dopaje a principios del siglo XXI en Estados Unidos. «Creo que esto ocurre en Estados Unidos, en Rusia y creo que es como en la antigua Alemania del Este. ¿Y qué lo impulsa? Es el dinero. Esto es sobre dinero, es sobre corrupción», insistió Conte, quien estuvo en prisión en 2005 por ser declarado culpable de conspiración para distribuir esteroides y por blanqueo de capitales.