Los fallos se pagan caro

En los primeros compases fue la Segoviana quien tomó el mando del partido. Ayrton, en el minuto dos, tuvo en sus botas el primer acercamiento. El Rápido presentó una presión muy alta con la que buscó forzar el fallo de su rival y cazar algún balón en las inmediaciones del área segoviana, y así fue. Chema, en el minuto 4, dejó un balón en tierra de nadie en su cesión a Facundo y Pablo Carnero, muy atento, aprovechó ese despiste para meter el pie y materializar el primero de la tarde. El planteamiento del Rápido pareció contagiar al estilo del cuadro dirigido por Abraham García, que abandonó durante unos minutos su inicial idea de fútbol combinativo. En el minuto 17, Ayrton, el atacante más activo del conjunto visitante, casi enchufa un balón muerto que cazó en el área pequeña tras un córner, pero le engañó el bote y su remate se fue por encima del travesaño. Pasado el ecuador de la primera mitad, el Rápido cedió en la presión y la Segoviana volvió a dominar. En el minuto 30, Leira abrió para Ayrton, que por primera vez pilló desprevenida a la zaga aurinegra en zona de tres cuartos, y filtró un pase profundo para Dani Calleja que ante la salida de Brais lo batió por bajo y puso su sello al tanto del empate. A raíz de la igualada, el conjunto azulgrana se soltó y comenzó a jugar con mucha más comodidad. Por su parte, el Rápido de Bouzas continuó con un trabajo físico sin balón de mérito, lo que le permitió marcharse al descanso con el 1-1 en el marcador.

En la segunda mitad, el cuadro olívico salió más espabilado que en los primeros 45 minutos. Ambos equipos se volcaron en ataque en busca de los tres puntos y el choque se convirtió en un correcalles. Los cambios realizados por Borja Jiménez supusieron un balón de oxígeno para su equipo, que empezó a bajar el nivel físico por el cansancio. Nada más entrar, Iago Pérez puso en pie a la grada con un fortísimo chut desde la izquierda que se estrelló en el lateral de la meta defendida por Facundo. Pocos minutos después, de nuevo Iago Pérez remató a la perfección un centro desde la banda derecha que a punto estuvo de sorprender al meta del cuadro gimnástico. La Segoviana se vio claramente superada en los segundos 45 minutos por el juego rocoso del Rápido, que no les permitió jugar con comodidad. En el minuto 81, un testarazo inapelable de Pablo Carnero a la salida de un saque de esquina rompió la igualada y acercó los tres puntos al cuadro local. Anderson pudo ampliar la ventaja en un mano a mano con Facundo tras una gran contra, pero el meta solventó la situación con una gran parada. El cuadro vigués contó con varias ocasiones para matar el partido pero no las materializó. Lo mismo le paso a la Gimnástica con sus opciones de empatar. En los últimos minutos, Ayrton se revolvió a la perfección en el área chica y dispuso de una clarísima ocasión. Sin embargo, su golpeo blando lo detuvo Brais y, con él, las opciones de puntuar en el Baltasar Pujares.