«El gol es cosa de todo el equipo»

Las aguas bajan más calmadas en El Hospital desde que La Granja ha encadenado dos triunfos consecutivos ante el Real Ávila y La Bañeza. Ha abandonado los puestos de descenso del grupo octavo de Tercera División y ya mira a la mitad de la tabla. Uno de los principales artífices del resurgimiento del equipo que entrena Javier Jadraque ha sido Juanlu (Segovia, 1984), quien volvió a marcar el pasado sábado y figura en la segunda posición de la clasificación de goleadores del grupo con seis tantos.

Solo le supera el palentino Diego Torres, aunque es algo que no preocupa demasiado al delantero del conjunto granjeño, que agradece el apoyo que le han brindado tanto el cuerpo técnico como sus compañeros y la directiva al liberarle de la responsabilidad de ser casi el único encargado de marcar los goles tras la marcha de Carlos Quintana. Juanlu destaca que la importancia otorgada por todos al colectivo le ha permitido jugar «más relajado», aunque admite que no puede evitar darle vueltas a la cabeza, como todos los delanteros, cuando en algún partido se queda sin marcar. En cualquier caso, de sus palabras se desprende que en La Granja ha recuperado la felicidad a la hora de jugar.

Parece que el enfermo ya tiene mejor color ¿no?

Sí, sí. Eran necesarias estas victorias; sobre todo la del Ávila, porque nos ha ayudado a coger mucha confianza. Eso, y la llegada de Guiller y el cambio de actitud, han hecho que saquemos los resultados positivos que estamos logrando ahora.

¿Cree que al equipo le estaba faltando actitud?

Puede que sea una mezcla de todo. A lo mejor no era tanto falta de actitud como que cometíamos fallos puntuales. Hubo días en los que no se nos pudo achacar faltar de actitud, como el del Salamanca, como el del Palencia, que estuvimos a punto de remontar... Por eso creo que más que un tema de actitud es un compendio de errores puntuales y de despistes globales del equipo.

¿Ha sido tan importante la vuelta de Guillermo como parece?

Sí. Ya no solo por el hecho de que sea importante en esa posición, aunque teníamos gente que la podía cubrir. Pero no deja de ser una persona experimentada que juega, que sabe cómo jugamos, que conoce al equipo... También es importante a nivel motivacional porque es nuestro preparador físico y nos exige mucho en cada entrenamiento.

¿Llegaron a surgir dudas que hicieran peligrar la unidad del vestuario?

Yo creo que era muy pronto todavía. Sí que es verdad que te ves abajo en la tabla. Pero habiendo pasado tan pocos partidos siempre hay tiempo de mejorar y de poder solucionarlo. Por ello, dudas no, pero sí te empieza a entrar un sudor frío cuando piensas que estás ahí abajo y que puede ser difícil salir de ahí. Si esta situación se da a mitad de temporada, sí que te digo que las consecuencias habrían sido peores, sobre todo a nivel anímico.

¿La plantilla cree que no se va a repetir una racha tan mala?

Hombre, nunca digas de este agua no beberé. La Liga es muy larga y hay tiempo para todo, pero una racha tan difícil... Por lo menos tenemos ya la experiencia para saber cómo afrontarla y salir de ella si se vuelve a dar. Pero tenemos que poner de nuestra parte para que no vuelva a pasar.

¿En su caso se le vino un poco el mundo encima cuando se supo que Quintana no iba a seguir y que la faceta goleadora iba a depender en buena medida de usted?

No creo que me recayera tanta responsabilidad porque tanto el técnico como el equipo y la directiva nunca se fijaron en un único jugador sino que hemos mantenido la idea de que no somos personas individuales sino un equipo. Por tanto, no era una responsabilidad que me cayera a mí sino a todo el equipo. En ese aspecto, bien, porque te liberas un poco y juegas los partidos más relajado. Pero ya te digo que nunca me han trasladado ningún sentimiento de responsabilidad ni de que si no marcaba goles íbamos a perder. No, no, por el contrario. Ha sido una cosa de equipo y por eso hemos salido de donde hemos salido.

Sí que se le ve más cómodo que la temporada pasada.

Estoy más cómodo porque quizás este año tengo menos responsabilidad. O porque se le da menos importancia al hecho de que en un partido no haga un gol, como a lo mejor sí se le daba el año pasado. No hacía gol en un partido y ya era un demonio. Este año, como es una cosa más del equipo, estoy bastante más tranquilo. Se le da bastante valor a los entrenamientos y se te valora en función de lo que has hecho durante la semana y no a partir de si has marcado un gol en un partido concreto.

Figura en segundo lugar en la tabla de goleadores del grupo.

No es algo habitual, pero esta racha creo que es el resultado del cambio motivacional y anímico que ha sufrido el equipo. Se ha dado la casualidad de que he metido yo los goles, pero todos los que están jugando arriba, como yo, y los centro del campo están respondiendo muy bien. Más que desde un punto de vista individual, habría que valorarlo más a nivel grupal.

Pero gusta verse ahí ¿no?

Sí claro, no te voy a engañar. Claro que gusta. Igual que te engañaría si te dijera que no lo he visto. Pero hay que seguir con la racha, que ya se sabe que los delanteros vivimos en parte de esto. He tenido la suerte de marcar pronto en los partidos y eso hace que los encares ya de una forma distinta y que vaya en beneficio del equipo.

¿Se obsesionan mucho los delanteros si están un par de partidos sin marcar?

Sí. Y cuando estás uno incluso. Te autoimpones la responsabilidad de marcar gol porque si no tu equipo no gana. Eso es lo que piensa todo delantero innatamente. Pero poco a poco vas viendo que cada uno tiene su función. Un defensa también se puede ir mal a casa porque haya fallado en un despeje, un centrocampista por no haber podido dar un pase... Sí que es verdad que es más acentuado en los delanteros, pero gracias a la mentalidad de equipo que tiene este club se atenúa bastante.

¿Siente la confianza de Jadraque?

Sí, es básica. La confianza que se me ha trasladado es muy importante. También estoy respondiendo.

Se le está viendo, además, asumir tareas de liderazgo.

La primera vez que estuve en La Granja fue recién salido de juveniles y estuve bastantes años. Ya en aquel momento, por los años que llevábamos al final, había ciertas personas que teníamos algo más de peso. Ahora no somos un equipo de líderes sino de once líderes sobre el campo, pero quizás algunos sí que aportamos nuestra experiencia para ayudar a los más jóvenes. En ese aspecto sí que me considero una persona más experimentada, pero no un líder.