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Kwiatkowski se proclama campeón del mundo en Ponferrada

Alejandro Valverde llegó a tiempo para el bronce, por detrás del australiano Simon Gerrans, y sumó su sexta medalla en campeonatos mundiales

rober ugarte

Domingo, 28 de septiembre 2014, 22:45

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Con la juventud por bandera con un fondo en rojo y blanco el polaco Michal Kwiatkowksi se coronó campeón del mundo en ruta en el campeonato disputado en Ponferrada. El corredor de tan solo 24 años apostó por la valentía y el riesgo en los kilómetros finales y se hizo merecedor de un triunfo que escribe un capítulo dorado en su todavía bisoño palmarés con la medalla de oro y el maillot arcoíris de campeón. A falta de 7 kilómetros para el final, en la última rampa del pantano, Kwiatkowski saltó del grupo principal en el que viajaban todos los favoritos a la caza del bielorruso Kiryienka, del danés Andersen, del francés Gautier y del italiano De Marchi que marchaban escapados y no solo llegó a ellos con facilidad sino que acto seguido continuó su demarraje para afrontar una contrarreloj de menos de 6 kilómetros en un pulso con los principales favoritos del que salió victorioso.

La carrera comenzó en el mismo momento en el que hacía acto de presencia la anunciada lluvia sobre El Bierzo, protagonista también y con el papel de dotar de mayor épica a la jornada y de mayor mérito al vencedor. La calma en el pelotón duró lo poco que tardaron el colombiano Carlos Quintero, el ucraniano Oleksandr Polivoda, el croata Matija Kvasina y el lituano Zydrunas Savickas en formar la escapada del día. Suyo fue el primer esfuerzo y también el reconocimiento del público presente en el recorrido de la carrera a cada paso por el Castillo de los Templarios, en la parte alta del Mirador o en la recta de meta. Con un pelotón en el que reinaba la tranquilidad su renta llegó a situarse por encima de los 15 minutos, pero ni la distancia física ni temporal tuvo visos de peligro para el gran grupo. Cuando el esfuerzo comenzó a pasar factura y la renta a decaer lentamente el trabajo atrás de Polonia minaba más si cabe la poca resistencia que quedaba en los corredores de cabeza. El trabajo de la selección polaca mostraba ya las intenciones del conjunto liderado por Kwiatkowski de mover y endurecer la carrera. También la selección italiana tomó posiciones en la cabeza del pelotón para ir recortando diferencias y poner un punto de exigencia adicional que se notara en la fase decisiva de campeonato.

Con 70 kilómetros por delante la aventura de los cuatro escapados tocó a su fin y comenzaron las hostilidades, con varios de los nombres importantes del pelotón involucrados. De nuevo los italianos Fabio Aru y Giovanni Visconti buscaron romper carrera y piernas con un tirón exigente. El arreón lo aprovecharon corredores como el suizo Albasini o el alemán Tony Martin para abrir una pequeña brecha sobre el pelotón con un grupo de 12 corredores en el que se encontraba el español Daniel Navarro. Atrás era Australia quien tenía que tomar la responsabilidad de tirar del pelotón al no incluir a ninguno de sus corredores en la fuga y para mantener así intactas las opciones al triunfo final de su jefe de filas, Simon Gerrans. De ahí en adelante la carretera no dio ni un minuto de respiro al todavía numeroso pelotón.

A 23 kilómetros del final fue cuando cuajó la penúltima escapada importante del día en la que se encontraban presentes Andersen, De Marchi y Gautier a los que se unió Kiriyenka para poner en jaque al pelotón con una ventaja en torno a los 55 segundos. Los cuatro corredores iniciaron la última vuelta al trazado con la que completar los últimos 18,2 kilómetros de un total de 254,8 con 35 segundos de renta y con España trabajando con Castroviejo e Izaguirre en las primeras plazas de un pelotón en el que también colaboraban las selecciones belga e italiana. Poco a poco el hueco de los escapados se reducía mientras atrás se producía el movimiento más decisivo de la carrera, el que definió al campeón mundial: el salto de Michal Kwiatkowski.

Tras el ciclista polaco y con una desventaja inferior a los 10 segundos salió Joaquim Purito Rodríguez que veía que la carrera se estaba decidiendo y la victoria podía escaparse igual que hace un año en Florencia, pero sus fuerzas acabaron tras envalentonar al resto de favoritos. Fue Valverde quien cogió la estela del barcelonés y con él se fueron el belga Gilbert, el australiano Gerrans, el danés Breschel y el francés Gallopin a los que se unió instantes después el belga Van Avermaets. Pero Kwiatkowski quería y veía el oro y el arcoíris pese a lo cerrado del cielo de Ponferrada. 9 segundos de margen al coronar la última subida, 7 poco después ya en pleno descenso y con dos kilómetros por delante, pero como se vio en pruebas anteriores cazar a un corredor en solitario al que da alas divisar la medalla de oro resultó misión imposible. Kwiatkowski afrontó la recta final con el hueco suficiente para mirar hacia atrás, recordar sus inicios en el equipo español Caja Rural, emocionarse al creerse al fin que iba a ser campeón del mundo y besar el escudo de su maillot antes de ser el primero en cruzar la línea de meta y parar el reloj en las 6 horas, 29 minutos y 7 segundos.

Por detrás Gerrans ganaba la batalla por la plata a solo un segundo de Kwiatkowski y relegaba a Alejandro Valverde al tercer cajón del podio y a la medalla de bronce en el campeonato del mundo, sexta en su casillero particular en el que ya contaba con dos platas y tres bronces. El murciano tenía estudiada la carrera tras el campeonato de España disputado también en Ponferrada pero en su estrategia no pudo calcular ni contar con el ataque de un Kwiatkowski que será un nombre frecuente en las clásicas del calendario ciclista en los próximos años.

Valverde: Creo que hemos corrido bien

Hasta seis medallas de campeonatos del mundo luce la vitrina de Alejandro Valverde, que de nuevo tuvo que ver como el oro colgaba del cuello de un rival. Dos platas y cuatro bronces con el conseguido ayer en Ponferrada en una carrera tras la que el murciano apuntaba al buen papel de la selección para repetir el resultado cosechado en Florencia: creo que hemos corrido bien, Kwiatkowski ha corrido fenomenal, iba en el grupo de adelante y ahí no estábamos nosotros solos y no podíamos controlarlo todo. Al final hemos endurecido en la última parte de la subida, ha arrancado Purito, ha seleccionado más y luego he arrancado yo para tratar de llegar con un grupo reducido y así ha sido y por eso he podido conseguir el bronce. El ciclista español sabía que las opciones de metal pasaban por plantear una carrera exigente como se vio y tuvo palabras de elogio para el vencedor final: no vamos a descubrir a Michal Kwiatkowski, es un corredor que tácticamente sabe correr muy bien y tiene un gran poderío. Era un corredor peligroso, es más joven que nosotros y tiene más oportunidades, pero estaremos luchando para darle todavía mucha guerra aunque va apuntando muy bien y será difícil, afirmó Valverde.

Kwiatkowski: Vi la oportunidad y la tomé

El campeón del mundo atendía a los medios de comunicación con el maillot arcoíris por primera vez sobre su torso y quiso agradecer a su selección como parte importante en el oro conseguido: hubo un gran trabajo de equipo, no planeamos mi ataque, vi la oportunidad y la tomé, vi esos cinco corredores por delante y vi que podría funcionar. Había visto la carrera de los sub 23 y sabía que un corredor solo podía mantener la diferencia y además no era lo suficientemente rápido como para luchar con Gerrans y Valverde en un sprint. Los 7 segundos de renta que cosechó tras su ataque fueron suficientes para lograr el triunfo, no sin sufrimiento y tras un esfuerzo titánico como el propio Kwiatkowski reconocía: yo giraba la cabeza y les veía venir y sabía que era todo o nada y que tenía que dar el 100%, no sé cómo lo conseguí, el ataque era bastante arriesgado pero me salió muy bien.

Tres heridos en el accidente de un vehículo de la selección noruega

Tres personas resultaron heridas en un accidente de tráfico registrado en la zona de bajada del pantano en dirección a Ponferrada en el transcurso de la prueba en línea del Mundial de Ciclismo de Ponferrada. El vehículo, que pertenecía a la delegación noruega, se slió de la calzada y descendió por una zona de terraplén mientras seguía el devenir de la carrera. Los tres ocupantes resultaron heridos y tuvieron que ser trasladados al Hospital del Bierzo para ser atendidos de las heridas sufridas así como de fracturas de diversa consideración según apuntaron fuentes del 112.

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