El Ecubús Ciudad de Salamanca se queda en Primera División

El Ecubús BMCiudad de Salamanca seguirá una temporada más en laPrimera División Nacional. El equipo salmantino se impuso ayer en la última jornada 31-24 a un BM Soria que ya no se jugaba nada y que acudió a la capital charra corto de efectivos, y certificó de esta forma una cara permanencia porque su gran rival, el BM Guadalajara, también ganó ayer su partido al líder Santoña (27-23) por lo que un empate o una derrota hubiera llevado a los de Alberto Martín al descenso.

El conjunto charro pone así un buen broche a una campaña en la que se ha movido siempre en el alambre aunque casi siempre fuera del descenso, en gran parte porque no ha sido capaz de sumar puntos fuera de casa hasta su último partido lejos de Salamanca, cuando en la penúltima jornada doblegó al colista Colindres.

El club salmantino había hecho una gran campaña a lo largo de la semana en redes sociales para volcar a todo el deporte salmantino en busca de la salvación y así ayer el pabellón Río Tormes registró un espectacular lleno demostrando que la afición de Salamanca al balonmano también está a la altura de la Primera División. El triunfo fue coral, con nada menos que seis jugadores con cuatro tantos cada uno, sin olvidar el gran trabajo de Javi Sánchez en la portería, renqueante durante la semana, y que se llevó una gran ovación al ser sustituido por el entrenador en los minutos finales con todo ya decidido.

Pese a no jugarse nada el BMSoria, la primera parte comenzó tremendamente igualada con incluso alguna renta mínima para los visitantes (6-7), aunque en el tramo final del periodo, los de Alberto Martín empezaron a hacer valer su gran deseo de salvarse para llegar al descanso con 16-14, con cuatro tantos ya de Aitor Petisco.

Pero en la reanudación todo cambió. El Ecubús pudo por fin correr gracias a una gran defensa cimentada desde la portería, mientras que al BMSoria se le empezó a hacer largo el partido por la falta de recambios. A todos menos a Jorge Lafuente, que dio un recital desde la primera línea con 10 tantos.

A partir del minuto 40 del partido, el ambiente del pabellón ya era de salvación. No solo por el 23-17 del electrónico del Río Tormes, sino por la convicción que mostraba el equipo salmantino en cada ataque y defensa. El paso de los minutos fue haciendo crecer a todo el equipo, que así pudo lograr que los diez minutos finales fueran una fiesta en la grada. Con 30-22 a cinco del final, Alberto Martín ya fue repartiendo reconocimientos: primero retirando de la pista al portero, luego al sempiterno capitán Sebas Elena. Con el pitido final y el 31-24 la celebración fue plena. Una salvación muy sufrida y ansiada por un Ecubús BMCiudad de Salamanca que se queda en Primera por méritos propios.

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