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Momento de un partido anterior del Unami.
El Unami se juega el crédito
baloncesto

El Unami se juega el crédito

El equipo segoviano recibe al Universidad de Salamanca con la obligación de mejorar su imagen tras forzar la dimisión de su técnico

nacho sáez

Viernes, 31 de octubre 2014, 20:50

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Las jugadoras del Unami se enfrentan al que posiblemente será el partido más duro de sus vidas. Juegan este sábado ante el Universidad de Salamanca (20:00 hoas, Pabellón Emperador Teodosio) apenas tres días después de forzar la dimisión del que era su entrenador, Mauro Martín. Aunque su juventud las exculpa en cierto modo, todas las miradas estarán centradas hoy en ellas. Tienen casi la obligación de jugar un buen partido para justificar el órdago lanzado esta semana. La coordinadora de la sección de baloncesto del Unami, Esther Muñiz, que se hará cargo del equipo hasta que encuentren un sustituto para el banquillo, subrayó este jueves la responsabilidad que ostenta ahora la plantilla. «Las chicas veían que necesitaban este cambio, pero ahora tienen que dar un paso adelante y poner todo para recuperar la ilusión», indicó Muñiz, que hoy se sentará en el banquillo para dirigir al equipo.

El proyecto, que arrancó este pasado verano con la apuesta del Unami por tener un equipo en la Primera División Nacional Femenina, pasa estos días una prueba de fuego, ya que a los malos resultados cosechados hasta ahora en la Liga (tres derrotas en otros tantos partidos y solo 128 puntos a favor por 206 en contra) se añade la crisis desatada con la dimisión del entrenador a instancias de las jugadoras. «Decían que todo lo que hacía estaba mal: no les gustaba nada de lo que hacía», comentó Mauro Martín. «No respetaban ninguna de mis decisiones».

Ahora es el turno para las jugadoras, que tienen que demostrar que el cambio de rumbo en el banquillo ha ido acompañado de un cambio de actitud. Sara Manrique, con compromisos personales, es la única baja en el equipo segoviano para medirse a un Universidad de Salamanca que ha empezado el campeonato con una victoria y con una derrota, pues al contrario que casi todos los demás solo ha disputado dos partidos. Es el escollo que tendrá que salvar el Unami, que se juega su crédito en el último capítulo de una semana para olvidar.

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