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Cartel de 'Marte (The Martian)'.
Náufrago

Náufrago

'Marte' respira gracias a la inercia y la fluidez de un montaje en el que la violencia de las elipsis queda solapada por el volumen de una pista sonora tramposa

josu eguren

Viernes, 19 de febrero 2016, 11:33

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"La posibilidad de que existan en Marte seres parecidos a los humanos es muy remota", sentenciaba con rotundidad el astrónomo Ogilvy en las páginas de 'La guerra de los mundos', de H.G. Wells, pero una y otra vez la ciencia ficción ha insistido en refutar sus afirmaciones imaginando formas antropomórficas ocultas entre los campos de dunas del planeta rojo y grandes acuíferos sumergidos en las entrañas del cráter Schiaparelli.

Lo que propone Ridley Scott con su adaptación de la novela 'El marciano', de Andy Weir, es radicalmente distinto, y está en la línea de lo que anticiparon escritores como Kim Stanley Robinson: colonizar Marte, abandonando sobre su superficie al náufrago de una expedición de la NASA con un soporte vital mínimo y sin provisiones suficientes para aguantar hasta la llegada de una misión de rescate. En tales condiciones, el astronauta de Scott tiene que recurrir al ingenio sembrando la narración de un pragmatismo científico no exento de retranca y ácido sentido del humor.

Por más que el crítico o el espectador se obceque en pretender de ella un drama compungido sobre la soledad y el aislamiento de un hombre que vive contra la certeza de su muerte, a 'Marte' hay que juzgarla por lo que es desde el momento que en el guión se desliza una frase antológica, tanto por su sencillez como por su descaro: "Por suerte, soy botánico". En una sola línea, el guionista, Drew Goddard, torna la incredulidad en herramienta fundamental para garantizar la supervivencia de una película que respira gracias a la inercia y la fluidez de un montaje en el que la violencia de las elipsis queda solapada por el volumen de una pista sonora tramposa. Heredero del 'Robinson Crusoe en Marte', de Byron Haskin, el marciano de Scott brinda por el futuro de un planeta multirracial hermanado en la conquista del universo.

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