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JESÚS BOMBÍN
Martes, 20 de febrero 2018, 16:23
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Conoce Ángela Hernández Benito la vida y la obra de José Zorrilla con tanto detalle como cada rincón de la casa natal del escritor. Trabajó en ella desde 1989 hasta su jubilación en 2016 como directora de la vivienda museo y ha publicado ‘Zorrilla: su vida y su casa’, un texto de 1.009 páginas editado por el Ayuntamiento de Valladolid en el que actualiza la biografía del autor de ‘Don Juan Tenorio’ e incluye una catalogación de los enseres que contiene el inmueble.
«La primera parte del texto es una biografía actualizada de Zorrilla, pues aunque Narciso Alonso Cortés ya escribió una sobre su vida y su obra, ha habido aspectos del escritor que con los años se han ido conociendo», relata Hernández, que presentó el libro en la Sala Francisco de Cossío de la Casa Revilla. Estructurada en nueve capítulos, la obra abarca la familia y la infancia del escritor, la Universidad, sus primeros amores, la huida y el lanzamiento de su carrera literaria en el entierro de Larra, sus amistades en París, el declive del Romanticismo, el Zorrilla cosmopolita y sus viajes, la vuelta a la patria, el homenaje nacional en Granada, su coronación y muerte, todo ello acompañado por 1.197 citas bibliográficas, fotografías e ilustraciones.
«Tuvo una vida de película, siempre con una economía muy ajustada y escasa; cuando murió, todo lo que tenía eran cincuenta duros, aunque eso no se sabía, lo conocían los literatos más próximos, pero no el gran público», apunta Ángela Hernández, que no deja de sorprenderse por el afán que guio a Zorrilla de «escribir para que su padre lo tuviera en consideración».
Sostiene la investigadora que con ‘Traidor, inconfeso y mártir’ se dio por cerrado el drama romántico en España. «Es su más brillante obra dramática, pero la mejor de todas, en mi opinión, es ‘Recuerdos del tiempo viejo’». La que fue directora de la Casa de Zorrilla considera que el poeta tuvo siempre muy presente en su vida la vivienda donde nació. «Se acordó de ella siempre, en otros lugares y en todos los acontecimientos de su vida, estuvo muy marcado por esa casa».
El libro recoge la catalogación comentada de 372 bienes muebles y objetos artísticos del museo, un modo, defiende Ángela Hernández, de trascender la conmemoración del bicentenario del nacimiento de José Zorrilla y el 125 aniversario de su fallecimiento. «Bucear en lo más recóndito de la vida de un poeta, merodear por las estancias de la casa, acceder a los enseres que estuvieron en contacto con su persona, imbuirse de la nostalgia de su existencia y hacer presente su recuerdo por medio de este abrevadero sentimental que constituye su museo, forma parte de esa aspiración de llegar a comprender la dimensión de su existencia dentro del mundo en el que vivimos».
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