Borrar
Entrada al Colegio de San Gregorio y Museo de Escultura.
El Museo de Escultura abrirá seis nuevas salas y la Casa del sol será almacén visitable

El Museo de Escultura abrirá seis nuevas salas y la Casa del sol será almacén visitable

Inaugurará este año las estancias de San Gregorio y diseña un plan para acoger la colección del Museo de Reproducciones de Madrid

Jesús Bombín

Domingo, 2 de noviembre 2014, 12:44

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Cadenas de San Gregorio será una calle de Valladolid dedicada casi por completo al arte cuando el Museo Nacional de Escultura culmine su ampliación. A las sedes del Palacio de Villena, el Colegio de San Gregorio y la iglesia de San Benito el Viejo se unirán los dos mil metros cuadrados de la Casa del Sol, según un proyecto en el que trabaja el centro museístico, que ha encargado sendos estudios sobre las capacidades de este edificio y las necesidades de traslado y exposición de la colección del Museo de Reproducciones Artísticas, que ahora depende del centro vallisoletano aunque sus 3.300 piezas permanecen almacenadas en el Museo del Traje de Madrid.

No obstante, la etapa más inminente de este proceso de ampliación es la apertura de seis nuevas salas en el Colegio de San Gregorio, que se inaugurarán antes de que finalice el año, según la previsión que madeja su directora, María Bolaños. «Estos espacios ayudarán a completar el discurso museístico y tendrán carácter monográfico», detalla.

Tres de las salas se dedicarán al relato expositivo de la historia del Colegio de San Gregorio, que alberga las colecciones de arte religioso en madera policromada desde el siglo XIII al XVIII, y el resto acogerán obras encuadradas en el título Arte y vida privada, con piezas de la colección que permanecen en el almacén y se enmarcan en la idea «del papel que cumplen los objetos artísticos y el desarrollo que alcanzan entre el Renacimiento y la Ilustración».

Una obra de Rubens, objetos orientales y otros procedentes de la colección del Duque de Lerma son algunos de los seleccionados para este espacio. En estas salas que hasta ahora han permanecido vacías y cerradas al público se mostrarán setenta piezas que incluyen grabados, mobiliario diverso, pintura y escultura.

Las estancias que se dedicarán a explicar la historia del Colegio de San Gregorio ofrecerán una perspectiva que va desde la arquitectura hasta la función que cumplió el edificio en el siglo XVI como centro de formación de teólogos, místicos, juristas o inquisidores, dando cabida a figuras como Bartolomé de las Casas, Bartolomé Carranza, Luis de Granada, Melchor Cano o Francisco de Vitoria.

También se contará su relevancia como foro de debate en el que se trataron cuestiones como la conveniencia o no de la lectura de las obras de Erasmo en España, o la conocida como Controversia de Valladolid, en la que se discutió sobre los derechos de los pueblos indígenas de América.

En ese recorrido por la historia del complejo se abordará su fundación como museo en 1842 al acoger obras de conventos desamortizados, y también se expondrán documentos cinematográficos que recuerdan que el recinto fue escenario de rodajes como el de Míster Arkadin, de Orson Welles en 1955, o el del cortometraje de José Val del Omar, Fuego de Castilla en 1959.

Pero la obra definitiva que culminará el plan director del museo será la rehabilitación de la Casa del Sol. Su plazo de ejecución dependerá de la financiación que llegue del Ministerio de Cultura, al que está adscrito el centro museístico. De momento se tiene claro cuál será su función al haberse concebido su uso como almacén visitable, un enfoque arquitectónico y expositivo que emplean algunos museos cuando se pretende mostrar una colección muy numerosa sin las exigencias de diseño y presentación de una exposición convencional. «Será un almacén abierto al público, donde las piezas estén agrupadas como en un depósito, en buenas condiciones de visita con la idea de hacer público algo que normalmente tiene carácter restringido», refiere María Bolaños.

Otra función de la Casa del Sol será la de exhibición de obras de menor interés, deterioradas e irrecuperables, con más valor histórico que expositivo. En la Casa del Sol tendrán acomodo las 3.300 piezas del Museo de Reproducciones Artísticas de Madrid en un plazo que a María Bolaños le gustaría que no excediese de «cuatro o cinco años». Entre el catálogo de obras que se podrían exponer figuran copias de obras de arte en yeso, bronce, papel y galvanoplastias, entre las que figura una colección de sepulcros como el del doncel de Sigüenza, el de Juan Padilla, y reproducciones de piezas del Partenón, del monasterio de Silos, esculturas clásicas de dioses griegos y obras del Renacimiento como El David, de Donatello o reproducciones de relieves. «Es importante que el Ministerio haya empezado a dar los primeros pasos; se ha abierto un proceso que tardará más o menos, pero el camino está señalado», comenta esperanzada María Bolaños.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios