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El delegado del Gobierno en Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, se saluda con el ministro de Justicia, Rafael Catalá.
El nuevo delegado del Gobierno pide «máxima contundencia» contra la violencia machista

El nuevo delegado del Gobierno pide «máxima contundencia» contra la violencia machista

Juan Carlos Suárez-Quiñones ha jurado su cargo en presencia del ministro de Justicia, Rafael Catalá

EL NORTE

Miércoles, 15 de abril 2015, 20:29

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El delegado del Gobierno en Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha ordenado esta tarde a los principales representantes de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en esta comunidad autónoma "máxima contundencia" contra la violencia machista.

"Perseguid con la máxima contundencia la delincuencia machista contra la mujer. Apurad el Código Penal al máximo de su interpretación y poned a los autores a disposición de los jueces", ha exigido después de jurar esta tarde en Valladolid, delante del ministro de Justicia, Rafael Catalá, su nueva responsabilidad.

Lealtad y fidelidad intensas a las administraciones públicas ha demandado Suárez-Quiñones a las fuerzas del orden para desempeñar, entre otros cometidos que también ha consignado el nuevo delegado del Gobierno, el de garantizar la protección a los más vulnerables e indefensos, como recoge EFE.

"Nuestra sociedad no será digna si no sabe proteger a los más desfavorecidos, a los más débiles", ha precisado antes de enumerar, como tercer mandato, la "máxima coordinación" con los cuerpos de las policías locales de Castilla y León, además de ponerse a disposición "de alcaldes y alcaldesas, de las gentes de sus municipios, que sientan vuestra protección".

Han tomado nota de ello el jefe superior del Cuerpo Nacional de Policía y el máximo responsable de la Guardia Civil en la comunidad autónoma, a quienes ha pedido que transmitan a sus subordinados la gratitud por el reducido índice de delincuencia en Castilla y León que, lejos de suscitar conformidad, "debe ser un acicate".

Suarez-Quiñones, designado por Real Decreto firmado el pasado 10 de abril, asume esta responsabilidad para "contribuir a garantizar los servicios públicos a los habitantes de esta tierra, ocuparme de su seguridad y prestar atención a sus problemas y necesidades".

Veintisiete años de servicio público ha desempeñado este juez, licenciado en Derecho por la Universidad de León que en 1987 ingresó por oposición en la carrera política, fue nombrado magistrado en 1990 y poco después fue destinado en Getafe (Nadrid) como juez de primera instancia. Ha sido juez decano de León, miembro del TSJ de Castilla y León y subdelegado del Gobierno en León.

El nuevo delegado, que sustituye a Ramiro Ruiz Medrano tras una ejecutoria de tres años y medio, se ha puesto a disposición de los ciudadanos para "trabajar con lealtad, codo con codo, con el Gobierno de la comunidad autónoma, así como con el resto de las administraciones públicas, instituciones y entidades que representan intereses colectivos, especialmente de empresarios y trabajadores.

"Quiero ser un delegado del Gobierno para todos los ciudadanos", ha subrayado delante del presidente de la Audiencia Nacional y del TSJ de Castilla y León, José Ramón Navarro y José Luis Concepción, respectivamente; de la presidenta de las Cortes regionales, Josefa García Cirac; de los consejeros de Hacienda, Pilar del Olmo, y de Fomento, Antonio Silván; y del alcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva, entre otros representantes institucionales.

Ha tenido también palabras para los trabajadores de la Administración General del Estado en la comunidad autónoma, a quienes ha pedido la aplicación de las normas "con rectitud pero interpretadas siempre con las miras puestas en una solución".

La administración, ha puntualizado, "no puede ser un fin en sí misma", sino "un instrumento de aplicación de las normas para satisfacer el interés social que las motiva", para procurar siempre la satisfacción del ciudadano.

Ha comprometido también "accesibilidad y transparencia" ante los medios de información para garantizar el derecho a la información de los primeros y el de los ciudadanos a recibirla de forma veraz, y ha concluido con un recuerdo a su familia y a su antecesor en el cargo, Ramiro Ruiz Medrano, de quien ha tomado nota de su "templanza, prudencia y criterio".

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha destacado la vocación de servicio, diálogo y cercanía que deben dirigir todas las acciones de un servidor público como es el delegado del Gobierno, especialmente "en una de las etapas más difíciles de la reciente historia de España".

No ha obviado Catalá la existencia de "desafíos institucionales" procedentes de determinados territorios que amenazan la unidad del Estado, ni tampoco los que pretenden "someter a revisión" el régimen derivado de la Constitución de 1978, "un instrumento jurídico y de convivencia que nos ha procurado la etapa más brillante y duradera de convivencia ciudadana", ha concluido.

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