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Seis años pidiendo mejoras en la N-1 y la liberalización de la AP-1

Seis años pidiendo mejoras en la N-1 y la liberalización de la AP-1

La Plataforma de Vecinos Afectados por la N-1 ha convocado a las 17 horas un corte de la carretera

M.O.

Jueves, 18 de agosto 2016, 16:16

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Un accidente en el que fallecieron cuatro personas en la madrugada del 18 de agosto de 2010 fue el detonante que supuso la creación de la Plataforma de Vecinos Afectados por la Nacional 1. Ese siniestro frente a las casas de la localidad burgalesa de Quintanapalla llevó al día siguiente a muchos vecinos y usuarios de la vía a manifestarse para reclamar algo que ya se pedía desde hacía años: una solución para el corredor Burgos-Miranda de Ebro.

«En la provincia burgalesa, la Nacional 1 ha copado titulares desde el año 1994 cuando se produjo la primera prórroga de la concesión de la AP-1, la más importante», recuerda el portavoz de la Plataforma, Rafael Solaguren. «Esos años hubo manifestaciones en Miranda de Ebro muy duras y reprimidas», explica, antes de añadir que «en Briviesca también, se manifestaban, cortaban la carretera, recibieron multas...». Así, «en Miranda, se solucionaron las movilizaciones con un tramo gratuito de circunvalación, luego se proyectaron unas mejoras para la Nacional 1 que hicieron que las protestas decayeran, pero quedaron esas mejoras sin ejecutar», señala.

Solaguren relata cómo «justo coincidió que, en torno a Atapuerca, se creó una mancomunidad de municipios para temas turísticos y, en 2009, se juntó todo: unos socavones en la carretera terribles, con el fallecimiento de un matrimonio de Monasterio de Rodilla y arrancamos». Sin embargo, «enseguida se politizó el asunto, que si gobernaban unos y otros, que si habían hecho tal o cual cuando estaban los otros, y vimos que había que separarse». Ese accidente de la madrugada del 18 de agosto de 2010 «hizo que la gente saliera a la calle sin mirar de qué partido, ni de qué pueblo, ni de qué nacionalidad eran los que fallecían, sino simplemente a pedir que esto se solucione».

Desde 1994, cuando tenía que haber finalizado la concesión privada de la autopista AP-1, han fallecido en la N-1 más de 250 personas. A pesar de la reducción generalizada de la siniestralidad viaria en todo el país, el corredor Burgos-Miranda mantiene una siniestralidad alta con 55 víctimas mortales en los últimos diez años. Las últimas cinco en la misma semana del pasado mes de julio. «Entonces, se convocaron distintas manifestaciones con motivo de estos siniestros de mediados del mes pasado, en Briviesca y en Pancorbo, como siempre los domingos siguientes a las 13 horas, y se decidió hacer una un día entre semana en el que se pueda ver el tráfico que tiene todos los días esta carretera», anota Solaguren. «Los domingos es cuando menos tráfico hay y era el día que nos lo autorizaban" y, además, este día coincide con el accidente que hubo hace seis años en Quintanapalla y que fue el detonante de que los vecinos saliéramos a la calle y se creara esta plataforma».

«Después de seis años desde su creación, todo sigue más o menos igual», apunta el portavoz de la Plataforma vecinal. «El principal problema es que se trata de una carretera obsoleta», subraya, antes de recordar que «recientemente se ha publicado un estudio de la Universidad de Valencia, y hay otros internos del Ministerio de Fomento, que confirman que es una carretera obsoleta que actualmente no cumpliría con la norma de trazado de carretera». Sin embargo, «se realizan obras de mejora, pero no se corrigen defectos que se sabe que están, a lo que hay que añadir que tiene una altísima densidad de tráfico». En definitiva, el representante de los vecinos afirma «todo ello hace que esta carretera sea peligrosísima». De esa densidad, el 50 por ciento o más son camiones. Por lo tanto, «además de las deficiencias, todo pasa por sacar tráfico de la Nacional y emplear la autopista que circula paralela, a escasos metros, y que no está saturada, lo único que pasa es que es muy cara, se la van concediendo prórrogas y es un sistema de recaudación del Estado», asegura Solaguren.

«Es muy difícil encontrar los datos exactos que antes teníamos con mucha facilidad», destaca el portavoz, en referencia a la densidad. Los vehículos pesados suponen durante nueve meses al año más de la mitad del tráfico de este tramo de carretera, pudiendo suponer hasta el 80 por ciento en días y horarios laborales habituales durante la mayor parte del año. «Julio, agosto y septiembre hay más vehículos ligeros que pesados», anota. Y recuerda que, por ejemplo, ahora, todo ello se mezcla con cosechadoras, empacadoras y vehículos especiales. Casi 5.000 vehículos pesados circulan a diario de media por una carretera convencional, mientras apenas 3.500 lo hacen por la vía de alta capacidad, la AP-1. Desde la Plataforma de Vecinos consideran que solo hay un motivo: el peaje de una autopista cuya concesión inicial por 20 años acabará alargándose hasta los 44,5 cuando finalice el 30 de noviembre de 2018. Por ello, esta agrupación lamenta que «ninguna medida haya ido encaminada a reducir el tráfico», señala Solaguren que recuerda «una especie de bonificación que no sirvió para nada el año pasado». «Fue durante unos meses y lo único para lo que sirvió fue para que los que ya cogían habitualmente la autopista tuvieran un descuento», afirma.

Corte de la N-1

Por ello, esta tarde, a las 17 horas, han convocado una manifestación en el lugar del último accidente mortal hasta la fecha en la Nacional 1: km 275. Piden que los asistentes acudan de negro y con chalecos reflectantes (obligatorios por motivos de seguridad). La Plataforma ha puesto autobuses desde distintas localidades por las que pasa la carretera para que los vecinos acudan. El objetivo exigir que el presupuesto destinado a obras y bonificaciones innecesarios se emplee en aplicar la gratuidad sin condiciones para la circulación de vehículos por la AP-1 y «reclamamos la inmediata liberalización de la autopista de peaje para que todos los vehículos que así lo consideren puedan circular de manera libre y gratuita». Asimismo, «denunciamos la existencia de numerosas deficiencias de señalización y seguridad que, de manera incomprensible, siguen sin subsanarse». Según la asociación vecinal, «la N-1 no reúne unas condiciones de seguridad suficientes para la intensidad de tráfico que soporta y resulta del todo necesario derivar el tráfico a la AP-1 liberando esta del peaje, única causa de que no sea empleada por más vehículos».

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