Borrar
Procesión por el barrio de Santo Tomás, fundada hace tan solo tres años./ F. Jiménez
La joven procesión de Santo Tomás de Medina cumple con sus rituales
SEMANA SANTA

La joven procesión de Santo Tomás de Medina cumple con sus rituales

La carroza estrenó anoche cirios de madera y unas faldillas nuevas

PATRICIA GONZÁLEZ

Jueves, 17 de abril 2014, 15:29

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Cuando las agujas del reloj marcaron las siete y media de la tarde de ayer y cuando finalizó la imposición de casi una docena de medallas a los nuevos cofrades, la imagen del Cristo Crucificado del siglo XVI y atribuido a Francisco Rincón de la Cofradía del Calvario, volvió abrir de par en par las puertas de la parroquia de Santo Tomás para recorrer al son de los tambores y de las marchas procesionales las principales vías del distrito cómo fueron la calle Valladolid o la Avenida Constitución.

«Esta procesión es de piedad popular, con carácter penitencial y muy querida por los vecinos de Santo Tomás, ya que se desarrolla en el barrio, donde hay un gran cariño por la cofradía y por la talla que procesiona», comentó el presidente de la Junta de Semana Santa, Carlos García Serrada, quien mostró su satisfacción al ver cómo en el ecuador de los desfiles la meteorología no ha defraudado y el buen tiempo ha posibilitado batir récords de asistencias a las procesiones. Por tercer año consecutivo, el Santísimo Cristo Crucificado, junto a otras dos cruces desnudas que simulaban en la carroza el momento en el que Jesús fue crucificado, desfiló entre multitud de medinenses.

La talla de elevado valor artístico y que de manera habitual se sitúa en el retablo mayor de la iglesia de Santo Tomás efectuó, al igual que el pasado año, cinco paradas por diferentes puntos de todo el recorrido. En cada parada se realizó una meditación diferente y el sonido roto de los tambores fueron el hilo musical del desfile.

A modo de novedad, y «con el poco dinero que tenemos», según puntualizó el presidente de la Cofradía, José María Arce, la carroza de este año estrenó varios cirios de madera y unas faldillas. La procesión contó con la presencia del comisario de la Policía Nacional de Medina y de un representante por cada una de las ocho cofradías que conforman la Junta de Semana Santa.

El silencio volvió hacer acto de presencia alrededor de las once de la noche, cuando el Cristo del Vía Crucis (anónimo, siglo XVI) salió de la iglesia de San Miguel Arcángel con la Cofradía del Descendimiento.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios