Tras los pasos de Santa Teresa

Teresa de Cepeda y Ahumada, Teresa de Jesús, llegó a Segovia el 18 de marzo de 1574 para fundar el primer convento de las madres carmelitas descalzas. Se hospedó en el Mesón del Aceite, situado en la calle de San Francisco, cercana al Acueducto, junto con otras cinco religiosas, dos de ellas segovianas, y al día siguiente visitó de madrugada la casa de la calle Marqués del Arco que había alquilado para realizar esta primera fundación en Segovia, que se topó con la oposición de los monjes dominicos y mercedarios, detalla Alberto Herreras. El historiador ha ejercido el papel de cicerone para oficiar de guía en el primero de los actos que pretenden seguir y desvelar el legado material y espiritual dejado por la santa durante su estancia segoviana.

El pasado viernes, y coincidiendo con el 499 aniversario del nacimiento de la mística, abrió sus puertas el convento de San José de la ciudad. Fue una ocasión única de adentrarse en este templo de la calle Marqués del Arco que habitualmente permanece cerrado y que custodia algunas de esas huellas tangibles que Santa Teresa dejó en la ciudad. Allí se encuentran una almohada, un bastón o una caña que utilizaba para pasar objetos por el torno.

Los prolegómenos del quinto centenario del nacimiento de la santa abulense ya están en marcha en las diecisiete ciudades que conforman la red teresiana. Este prólogo lo marca la expedición de una credencial para que visitantes y peregrinos, al estilo del Camino de Santiago, sellen su paso por las localidades donde siguen en pie los conventos que fundó. Se ha optado por esta iniciativa ante la imposibilidad de establecer una ruta única viable para los peregrinos, dada su extensión, y porque incluso un recorrido cronológico haría picos en el mapa, según explicaron representantes del Ayuntamiento de Segovia en la presentación de los actos.

En el caso de Segovia, la novena fundación de Santa Teresa, el sello está disponible, entre otros lugares, en el Centro de Recepción de Visitantes y probablemente también en el convento de los Padres Carmelitas Descalzos de San Juan de la Cruz, «independientemente de que las monjas carmelitas también lleguen a ofrecerlo finalmente o no», ha precisado recientemente la concejala de Turismo, Claudia de Santos.