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Fernando Dávila, Carmen Fernández y Juan Antonio Martín Mesonero escenifican con sus manos el acuerdo alcanzado. / Almeida
La mediación evita el juicio en cuatro de cada diez pleitos
UNIVERSIDAD

La mediación evita el juicio en cuatro de cada diez pleitos

Los nuevos profesionales reducen de 548 a 88 días la duración media de los litigios

RICARDO RÁBADE

Lunes, 24 de febrero 2014, 13:40

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Desde que el mundo es mundo en lo más profundo de la esencia de los seres humanos aflora una tendencia natural al enfrentamiento y al conflicto, propiciado por arrebatar lo ajeno y codiciar lo que tiene el vecino. Pero, al mismo tiempo, la sana y constructiva práctica de mediar entre dos bandos beligerantes ha sido una constante desde los orígenes de la humanidad. Y, sin embargo, el paso de los siglos no ha supuesto que en las universidades se cultive el imprescindible magisterio para formar a especialistas en un concepto que, pese a resultar ancestral, rezuma a modernidad por los cuatros costados.

Desde ayer, sin embargo, tres instituciones salmantinas de prolífica tradición y prestigio reconocido Universidad de Salamanca, Colegio de Abogados y Cámara de Comercio e Industria han comenzado a sortear estas dificultades, sumando esfuerzos con la sugestiva puesta en marcha de un nuevo título propio de la Usal, como es el diploma de especialización en mediación. Para ello, las tres entidades plasmaron sus anhelos mediante la protocolaria firma de un convenio de colaboración en la mañana de ayer en la Sala de Juntas del Rectorado de la Usal.

Las cláusulas del acuerdo de cooperación fueron rubricadas por la vicerrectora de Docencia de la Universidad, Carmen Fernández; el presidente de la Cámara de Comercio, Juan Antonio Martín Mesonero, y el decano del Colegio de Abogados de Salamanca, Fernando Dávila. Los tres coincidieron en exteriorizar la evidente satisfacción institucional de las partes implicadas por el acuerdo conquistado.

Sin colapsos

Acariciar el sueño de una Justicia más rápida y que la misma «no se colapse» es uno de los ambiciosos retos que se han marcado las tres entidades con la articulación del nuevo título propio, según resaltó en sus explicaciones el presidente de la Cámara de Comercio, Juan Antonio Martín Mesonero.

Y es que las frías estadísticas arrojan datos absolutamente demoledores y que no tienen desperdicio. De esta forma y según detalló de forme pormenorizada Martín Mesonero, un litigio en primera instancia tiene una duración media en el ámbito de la Unión Europea de 548 días y un coste de 10.500 euros. Frente a estas variables que provocan todo tipo de quebraderos de cabeza en la ciudadanía que se ve en la obligación de recabar el auxilio de la vía judicial, la aportación de los mediadores resulta de una importancia absolutamente vital. Si la mediación se generalizara, los litigios se podrían resolver en un plazo de 88 días y con un coste medio de 2.500, totalmente por debajo de la elevada cuantía citada anteriormente.

El sencillo uso de la calculadora resume a la perfección las bondades económicas que podría conllevar la mediación en nuestro país. Es decir, si se materializara finalmente la optimista previsión de reducir a 10.500 a 2.500 euros el coste medio de cada litigio, se obtendrá un ahorro total del 76% por este concepto. De ahí, precisamente, la importancia de generalizar la mediación en los diferentes ámbitos.

La liturgia de beneficios que lleva impregnado en su seno la mediación se retrata con una comparativa absolutamente reveladora. Así y conforme a los llamativos datos desvelados por el presidente de la Cámara de Comercio e Industria, nada más y nada menos que cuatro de cada diez litigios se podrán resolver sin que las partes enfrentadas tengan que verse las caras en los juzgados en un juicio, gracias a la eficaz labor del mediador profesional.

Lastre empresarial

Las características, los contenidos y los objetivos docentes del nuevo título propio de la Universidad disipan las posibles dudas sobre sus beneficiosos efectos. Martín Mesonero recalcó que para las empresas resulta especialmente importante poder resolver de «manera rápida» los conflictos, dado que en la actualidad los procesos judiciales se alargan en el tiempo, lo que provoca un «lastre» en el tejido empresarial.

Tesis semejantes a las de Martín Mesonero fueron los argumentos que abanderó el decano del Colegio de Abogados de Salamanca, Fernando Dávila, quien derrochó sinceridad cuando lamentó profundamente que en España exista la «mala costumbre» de «judicializar todo» y recordó que la mediación puede servir, precisamente, para solucionar conflictos y dar una respuesta adecuada en pugnas y enfrentamientos, sin necesidad de acudir a la tortuosa vía judicial.

En cuanto al desarrollo del nuevo título propio, el director del mismo y vicedecano de Docencia de la Facultad de Derecho, Fernando Carbajo, explicó que, en realidad, las actividades docentes ya están en marcha este curso con un total de 34 alumnos matriculados. Por ello, el convenio rubricado ayer en la Sala de Juntas del Rectorado viene a enmarcar, desde el ángulo normativo, una labor docente que ya viene desplegándose desde comienzos del presente periodo lectivo, bajo la fórmula de actividad semipresencial.

El vicedecano de Derecho desglosó, además, que las tasas académicas de este nuevo título propio ascienden a 1.800 euros en concepto de matrícula. Además, puso especial énfasis en proclamar que el nuevo título propio de mediación constituye, en realidad, una formación «pionera» en Castilla y León por aunar en una misma experiencia docente y académicas los esfuerzos coordinados de tres instituciones.

Bajo el paraguas del nuevo título propio se pueden colocar, además, todos los miembros de esa gran familia que es la mediación. Así, la Universidad aporta magisterio y prepara a mediadores especializados, en un abanico variopinto, como la mediación mercantil, amén de otras ramas, como la mediación familiar, la civil, la concursal, la penal, la juvenil y hasta la sanitaria.

Para colmar las aspiraciones de todos estos sectores resulta absolutamente imprescindible una formación especializada, que es precisamente, la que pretende aportar la Universidad en un acción conjunta que pivota también de la mano de la Cámara de Comercio y el Colegio de Abogados. Además, el título propio se acompañará con tres seminarios complementarios como sinónimo de formación continua.

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