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Puente e Izquierdo, durante la sesión. / G. VILLAMIL
El Ayuntamiento reconoce que la reforma local no es la que habría planteado, pero no pedirá su retirada
VALLADOLID / PLENO

El Ayuntamiento reconoce que la reforma local no es la que habría planteado, pero no pedirá su retirada

De la Riva y el alcalde de Burgos se reunirán con la Consejería y el Ministerio de Fomento para tratar la situación del AVE

EL NORTE

Martes, 14 de enero 2014, 21:54

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El portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Valladolid, Jesús Enríquez, y, posteriormente, el alcalde de la ciudad, Francisco Javier León de la Riva, han reconocido que la Ley de racionalización y sostenibilidad de la Administración Local no es la que «habrían planteado los ayuntamientos», si bien han apreciado que sea también distinta a la propuesta inicial del Ministerio de Hacienda.

Pese a ello, el Grupo Popular ha rechazado sendas mociones presentadas por el PSOE e Izquierda Unida en el Pleno municipal correspondiente al mes de enero en las que se planteaba solicitar la retirada del texto o instar a la FEMP a facilitar el cumplimiento de los requisitos para promover un conflicto constitucional en defensa de la autonomía municipal.

Tras la negativa del equipo de Gobierno a debatir el anteproyecto de Ley del Aborto, el protagonismo del Pleno municipal ha quedado en las dos mociones de la oposición sobre la denominada Ley Montoro que, como ha advertido el portavoz del Grupo Socialista, Javier Izquierdo, ha contado con dos justificaciones «falsas» como que los ayuntamientos son los causantes de la deuda pública en España y que va a generar un ahorro.

En cambio, según Izquierdo, la nueva Ley se enfoca a atender las demandas de «muchas empresas de construcción que antes tenían muchas obras y ahora quieren chicha», pues considera que las competencias en algunos servicios sociales y materias como el abastecimiento de agua, la recogida de residuos o el pavimentado de calles de municipios de menos de 20.000 habitantes les sean «arrebatados».

Por su parte, el portavoz del equipo de Gobierno ha planteado su posición con una referencia a las supuestas diferencias en el PSOE sobre el método para plantear la oposición a esta reforma. «Han convertido el Pleno en una palestra para su lucha de poder», ha aseverado Enríquez, que posteriormente reconoció que, pese a que el Grupo está satisfecho con el texto de la nueva Ley, «no es el que habrían planteado los ayuntamientos.

El primer edil, en la rueda de prensa que ofrece después de los plenos municipales, ha coincidido en afirmar que la Ley aprobada no le gusta pero ha matizado que le gusta «más que el proyecto que presentó Antonio Beteta» y que sucede «como en el juego de las siete y media» porque «en unas cosas se pasa y en otras no llega».

En este sentido, ha recordado, igual que ha apuntado Izquierdo en el debate que la Ley permitiría al alcalde subirse el sueldo, por lo que ha reiterado que el reglamento que rige sus retribuciones lo estableció su predecesor socialista, Tomás Rodríguez Bolaños y que le gusta más que «lo que permite la reforma del ministro Montoro».

Por ello, reprochó duramente las tesis del concejal socialista Pedro Herrero, quien le acusó de «jactarse de lo barato que sale a los vallisoletanos, cuando siempre se ha fijado el sueldo que ha querido». El edil socialista también invitó al primer edil a «presumir» de la situación económica del Ayuntamiento en «los tres minutos» que le dé el PP en la «fiesta de la recuperación» que para él supone la Convención Popular que comenzará el 31 de enero.

Izquierda Unida ha insistido en pedir que el Ayuntamiento aclare lo antes posible qué competencias no podrá ejercer, de acuerdo con la Ley, pues teme que tenga consecuencias en la prestación de servicios; mientras que Javier Izquierdo ha aseverado que el Consistorio debería estar «preocupado» por la posibilidad de que sociedades municipales como VIVA o Auvasa puedan «verse disueltas».

Hubo acuerdo, al menos entre el PP y el PSOE, para presentar la moción conjunta que defiende la continuidad de las obras de alta velocidad entre Valladolid , Burgos y el País Vasco. Un proyecto que, según el presidente del Grupo Socialista, Oscar Puente, apuesta por el «corredor ferroviario más importante» del norte y el oeste de España y que, a juicio del 'popular' Jesús Enríquez hace referencia a la infraestructura de alta velocidad que «ha traído mucha prosperidad» a Valladolid en los últimos seis años.

En cambio, la concejal de IU, María Sánchez, ha expresado la oposición de IU a la propuesta porque considera que las inversiones en el AVE han supuesto un «derroche» e implican una apuesta por un medio de transporte «elitista» que no da servicio a las «grandes masas» de la sociedad. Por ello, ha incidido en que sería más necesario prestar atención a las líneas convencionales, «que son las que pueden parar en los pueblos más pequeños», o las de cercanías, informa Europa Press.

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