Roban un camión con mercancía que estaba requisado en el depósito de la Policía Municipal

La Policía Nacional investiga la desaparición de un camión que estaba aparcado en el depósito de vehículos que el Ayuntamiento de Valladolid tiene en la zona del barrio del Peral, al sur de la capital vallisoletana. El furgón había sido requisado por dos agentes de la Policía Municipal a comienzos de la semana del día 11 de noviembre durante una operación rutinaria. Según explicaron fuentes oficiales, una patrulla de dos motoristas observó en la calle Olimpiadas como unas personas procedían a trasladar paquetes de un camión a una furgoneta. Los bultos contenían prendas textiles de lencería. Tras acercarse al camión, los individuos salieron corriendo y desapareciendo por la zona del Camino Viejo de Simancas.

Los agentes municipales recuperaron los dos vehículos y los trasladaron hasta el depósito del Peral, dando cuenta del servicio. Sin embargo, esa misma noche personas no identificadas cortaron la valla de alambre que rodea las instalaciones municipales, y se hicieron con el camión aparcado en el interior, sacándole del lugar y huyendo con él.

El vehículo, según indicaron fuentes policiales, apareció horas después en un municipio de la Comunidad de Madrid incendiado. Coincidiendo con este suceso, el propietario del camión se presentó horas después en las dependencias del Depósito Municipal para recuperar el vehículo y cuál fue su sorpresa cuando los empleados municipales le indicaron que había sido sustraído del recinto oficial.

Fuentes de la Jefatura de la Policía Municipal de Valladolid confirmaron la sustracción del vehículo, y rehusaron dar más detalles, ya que lo sucedido está siendo sometido a una investigación del Cuerpo Nacional de Policía, tras la denuncia que se ha presentado en la comisaría.

Funcionamiento de cámaras

En relación con el sistema de cámaras de vigilancia que están instaladas alrededor del recinto del depósito, desde la Jefatura no se confirmó si las mismas funcionaban con el modo de grabación. Los equipos de visión están colocados en postes y en las fachadas de los dos edificios con que cuenta la parcela, en la que las grúas municipales estacionan los turismos y motocicletas que son retirados de la vía pública, bien por haber cometido una infracción o por estar abandonados o embargados por los juzgados.

Desde la Policía Municipal se indicó que «se harán las investigaciones internas pertinentes para aclarar lo sucedido», por cuanto la vigilancia del depósito oficial está gestionada por una empresa privada que dispone de vigilantes jurados las 24 horas.

Durante la jornada matinal, dos agentes de la Policía Municipal acuden a una oficina del Peral para estar presentes en el pago de las tasas por sanciones de alcoholemias y embargos. La entrega de los vehículos no puede ser hecha por vigilantes privados, y es por ello que se justifica la presencia de personal del Ayuntamiento.