Una villa romana en el centro de Valladolid

¿Quién no ha soñado alguna vez con pasearse por una ciudad romana? Pero una de las de verdad, de las del antiguo Imperio de antes y después de Cristo, de las de la época de Julio César, Nerón, Claudio o Augusto. El dominio que ejerció Roma en Europa ha hecho la civilización de hoy, y su herencia es imborrable. Conocer la historia y cultura romana significa conocer el porqué de muchas cosas en la actualidad. Cabría ahora recordar la famosa escena de la película 'La vida de Brian' en la que se preguntan qué les han dado los romanos... Algo así quiere hacer la Obra Social La Caixa, quien inauguró en colaboración con el Ayuntamiento de Valladolid la exposición 'Romanorum Vita', una recreación de una ciudad romana en la que se describen sus rincones más reconocibles, las costumbres romanas y pequeños detalles que advierten de que hay ciertas cosas que no han cambiado tanto. A la presentación acudió el alcalde León de la Riva, quien destacó las huellas romanas que se pueden encontrar en Valladolid, el director territorial de La Caixa, José Manuel Bilbao, el secretario de la Fundación La Caixa, Luis Reverter, y la catedrática de arqueología y comisaria de la exposición Isabel Rodá.

La recreación se ha creado a partir de descripciones literarias y testimonios arqueológicos. De esta forma, la Obra Social La Caixa propone un pequeño viaje en el tiempo situando en pleno Paseo del Campo Grande de Valladolid una pequeña porción de ciudad romana. Pero la exposición no se trata de una visita al uso. 'Romanorum Vita' propone un acercamiento a la vida romana a través de los sentidos de la vista, el oído y del olfato. Está ambienta en una urbe romana de poco antes de la destrucción de Pompeya, que fue enterrada un 24 de agosto del año 79 d. C por una violenta erupción del Vesubio. Así, la 'estancia' comienza en una calle en la que se podrán ver unas ruinas (muy frecuentes en las ciudades romanas por el tipo de construcción), así como unos sanitarios, que en aquella época eran lugares de reunión para la población o una fuente, pues el agua era un elemento fundamental. Más adelante se puede encontrar un horno de leña, la casa de la casa de una familia media alta (con su distribución, los característicos colores que utilizaban como pintura e incluso los olores de una cocina romana) o una tienda de comida, precursora de lo que puede considerarse un restaurante de comida rápida. Los sonidos, los olores y una proyección sobre la fachada de la domus (casa romana) para explicar la actividad de una calle de la época, con los artesanos, habitantes, políticos en campaña electoral...etc, son los elementos de una exposición que sirve para transportar a los asistentes a épocas lejanas. Estará abierta al público hasta el día 6 de noviembre.