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PABLO GARCINUÑO
Miércoles, 14 de noviembre 2012, 12:26
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En Ávila, el paro ha sido absoluto en la planta de Nissan, donde solo han entrado los servicios mínimos previamente pactados. Un grupo de medio centenar de piquetes ha estado en la puerta de la fábrica al inicio del turno de mañana. Estos sindicalistas se han trasladado posteriormente a la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Ávila, donde se ha intentado obstaculizar la entrada de los funcionarios y se ha producido algún enfrentamiento sin mayores consecuencias. La comitiva ha recorrido después otras administraciones, institutos y comercios de la capital abulense.
La actividad ha sido escasa en los dos polígonos de la ciudad, donde se podían ver pocos coches y muchas naves cerradas sobre las 9 de la mañana. El movimiento es comparable al que puede haber un sábado, señala uno de los empleados que sí ha acudido a su trabajo, en el polígono de Las Hervencias. Luego, a lo largo de la mañana, muchos deciden ir abriendo. La situación ha sido similar en Vicolozano, con muy poca actividad.
Por otra parte, desde el Ayuntamiento de Ávila informaron que se había registrado un seguimiento de un 10 por ciento en los primeros turnos del servicio de limpiezas y de los autobuses urbanos. En este caso han salido además todos los servicios mínimos, funcionando con normalidad, que son los correspondientes a un sábado, registrándose una afluencia normal de viajeros, informa el Consistorio.
Durante las primeras horas no se produjeron incidentes de gravedad, más allá de la quema de neumáticos a las puertas de la empresa de autobuses urbanos, pintadas en escaparates de comercios y pegatinas en los mismos.
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