Los amigos de Adolfo

Su valía como líder, su capacidad de aunar distintas voluntades o su carisma han sido algunas de las características que han quedado de manifiesto en el coloquio que, bajo el título 'Mis experiencias con Adolfo', acogió ayer el Museo Adolfo Suárez y la Transición (MAST), de Cebreros, con motivo del 80 cumpleaños del primer presidente de la Democracia española.

«Un hombre profundamente humano, muy decidido, con una gran capacidad para hacer las cosas y muy honesto en todo lo que ha emprendido». Así definió Hipólito Suárez, conocido por todos como Polo, a su hermano. Reconoció que «en este último año se ha deteriorado bastante» debido al Alzhéimer y ya no es capaz de andar ni de contestar. Sin embargo, como si intuyera algo, «hoy estaba muy sonriente». También estuvieron presentes sus hermanos José María y Ricardo.

Al acto acudieron varios de los principales amigos y compañeros de su carrera política. Entre ellos, Rodolfo Martín Villa, ministro de Gobernación en el gobierno de la UCD entre 1976 y 1979. Definió al abulense como «un personaje excepcional en una época excepcional», como lo fueron Manuel Fraga, Santiago Carrillo o Felipe González. Este último, como único superviviente en la actualidad, debería de utilizar la «autoridad moral» que le da esa excepcionalidad «para poner en juego la complicidad entre distintos» que caracterizó a la Transición española.

Otro ex ministro, José Lladó, destacó del homenajeado su «capacidad de decisión, cargada de entusiasmo y alegría ante la dificultad, buscando siempre el interés general. Le echo mucho de menos». Por su parte, Daniel de Fernando, presidente de la Diputación de Ávila en la época del Gobierno de Suárez, dejó claro que el abulense no se olvidó de su tierra, ya que «en solo tres años, de 1979 a 1982, pusimos agua corriente y saneamiento a más de cien pueblos de la provincia».

Fernando Alcón es un amigo íntimo del ex presidente, a quien conoce «desde primero de Bachillerato». Estuvo con Suárez hace solo dos días y, aunque físicamente está bien, «ya no dice palabras», añadió. Todos ellos fueron acompañados por el alcalde de Cebreros, Ángel Luis Alonso, en la visita al MAST, que finalizó con la proyección 'Homenaje a Adolfo Suárez y a la Transición'. El vídeo es una sucesión de testimonios de amigos, compañeros y familiares sobre el carácter de Suárez y su relación con Cebreros, cuando «el niño guapo de Ávila», como se señala en el documental, venía a las fiestas con su sonrisa constante y su carácter cordial.