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LEY ANTITABACO

Un informe de Sanidad prohíbe fumar en las terrazas del Pasaje Gutiérrez

La resolución de los inspectores confirma que se trata de un «espacio cerrado»

J. Sanz

Jueves, 21 de junio 2012, 10:39

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El expediente abierto hace casi una año sobre la posibilidad o no de permitir fumar en el Pasaje Gutiérrez, convertido durante los primeros seis meses de vigencia de la ley antitabaco en el último reducto bajo techo para los adictos a la nicotina, está cerrado. Los técnicos del departamento de Salud Pública dan por concluida la investigación a través de una resolución que confirma la «prohibición expresa» de fumar en las terrazas de los cuatro bares de esta singular vía privada de uso público.

Así lo confirmaron ayer fuentes de la Consejería de Sanidad encargada de velar por el cumplimiento de la ley antitabaco. El proceso administrativo se inició a raíz de los dos expedientes abiertos contra otros tantos locales en los que los inspectores descubrieron a fumadores dentro del pasaje el 30 de junio del año pasado. Era un secreto a voces, dado que los propios hosteleros desconocían de entrada que debían prohibir fumar al entender que la histórica galería era un recinto abierto por las dos entradas laterales de las calles Castelar y Fray Luis de León. Tanto es así que durante esos primeros seis meses de vigencia de la normativa, sus terrazas siempre estuvieron llenas literalmente a reventar, en su mayoría, por clientes pitillo en mano.

Los hosteleros fueron sancionados al final con sendas multas de 601 euros por una infracción grave. Sus alegaciones parecen haber caído en saco rato después de que los técnicos confirmaran que el pasaje, en efecto, «es un recinto cerrado», según constaba en su informe inicial elevado ahora a definitivo.

Sin más sanciones

Para ello valoran la presencia de las dos cancelas de las entradas como elemento determinante para considerar que el pasaje no es un espacio abierto, como alegaron en su momento los hosteleros. A raíz de la notificación de la propuesta de sanción, los ceniceros desaparecieron de las terrazas y a comienzos de julio del año pasado colocaron pegatinas en las mesas con el cartel de prohibido fumar. Y ahí siguen.

Las fuentes consultadas explicaron que las sanciones de hace un año fueron las últimas impuestas en este espacio ahora libre de humos.

La singularidad del pasaje edificado en 1886, y catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1998, radica en su carácter privado. El Ayuntamiento negoció durante años con su propietaria mayoritaria una cesión «sin coste alguno la administración ha costeado sus últimas rehabilitaciones» para que este espacio pase a ser una vía pública del callejero de la ciudad.

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