Nace la novena cofradía penitencial de Medina

La Cofradía Penitencial de Cristo en su Mayor Desamparo dio ayer el primer paso para convertirse en la novena hermandad de la Villa de las Ferias. Y es que tras la aprobación de los estatutos y el nombramiento de la Junta Directiva en el cabildo público celebrado en la Ermita de Nuestra Señora del Amparo, el siguiente paso será que la Junta de Semana Santa y el Arzobispado, previa solicitud, determinen su efectiva participación en la Semana de Pasión medinense y su reconocimiento y aprobación eclesiástica, respectivamente.

Laura Domingo fue nombrada hermana mayor de la cofradía por unanimidad. La nueva presidenta consiguió el voto de las 60 personas asistentes al acto y prometió «trabajar con ganas e ilusión para conseguir que la cofradía se constituya definitivamente en el plazo más corto posible». El presidente de la Junta Local de Semana Santa, Carlos García Serrada, reconoció que «esta iniciativa demuestra la implicación de los medinenses para que su Semana de Pasión siga demostrando por qué fue declarada de Interés Turístico Internacional».

Con los valores de la austeridad, la sencillez y el carácter histórico como principales señas de identidad, la meta inicial es poder procesionar en la Semana Santa de 2013.

Pese a que aún no se ha constituido oficialmente, son más de 90 personas las que ya se han inscrito para formar parte de una cofradía que nace fruto de la devoción a San Vicente Ferrer, figura clave en la historia de Medina del Campo e instaurador en la villa de las Procesiones de Disciplina, hace más de 600 años. Bajo la advocación de Cristo en su Mayor Desamparo, según el portavoz de la comisión gestora, Juan Ignacio Gutiérrez, «la hermandad nace con el fin de formar el culto religioso de los cofrades y con la intención de promover actividades benéficas, aunque es complicado, ya que la cuota anual será de 12 euros, por lo que habrá que buscar fórmulas para financiarlas».

El paso titular de la cofradía será el conocido como Cristo en brazos de la muerte, una imagen esculpida en 2011 por el zamorano Ricardo Flecha. En ella, una oscura representación de la muerte sostiene a Cristo ya sin vida.

La segunda imagen de la cofradía será una talla que el mismo autor esculpió en 1990 y que se conoce como Cristo Preso. Completarán la imaginería el Arma Christi, una obra aún inacabada, también de Flecha, que representa los objetos que marcaron los últimos momentos de Cristo y, por último, una figura de San Vicente Ferrer.