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VALLADOLID

Baldosas rotas, acceso confuso y sin teléfonos

A. S.

Sábado, 18 de julio 2009, 03:12

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El hospital, abierto desde el pasado mes de noviembre tras ocho años de obras, todavía adolece de dificultades de acceso al tener una sola entrada para vehículos que además tiene una señal de dirección prohibida hacia el aparcamiento principal de los usuarios; aunque el Río Hortega ya tiene preparadas las máquinas de cobro y pintadas las plazas para su inminente puesta en marcha. Además, las baldosas y las juntas que ya habían sido reparadas para que pudieran transitar los robots han vuelto a romperse. «Primero fue el pesado equipamiento lo que destrozó el suelo y ahora son los carros con peso», indican fuentes sanitarias.

Las quejas también llegan del servicio de Urgencias por la «mala distribución de los espacios, la necesidad de sacar camillas de una habitación para introducir la de paradas o por la falta de luz natural que ha provocado ya molestias oculares entre los trabajadores». En la misma línea llegan las críticas hacia el diseño de la Unidad de Cuidados Intensivos, «por la falta de espacio en dos de los boxes, los destinados a trasplantados».

Los usuarios, por su parte, se quejan especialmente de la falta de teléfonos en las habitaciones en un hospital que además tiene mala cobertura para el móvil; lo que dificulta su comunicación con el exterior.

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