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EL NORTE
Viernes, 19 de diciembre 2008, 09:33
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El alcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva, confirmó ayer, durante el vino español que ofreció a los medios de comunicación, el vertiginoso ritmo que llevan las obras de la calle Duque de la Victoria. La velocidad es tal que el regidor confía en que esta céntrica vía se pueda abrir «mucho antes de Semana Santa» con el objetivo de que las procesiones no tengan que variar su recorrido. La empresa Ferrovial Agromán, adjudicataria de la reforma, ha desplegado en esta vía un buen número de operarios. La Policía Municipal cortó el tráfico en esta calle el pasado 10 de noviembre y en apenas dos días la constructora ya había levantado la calzada y trabajaba en la red de saneamiento. Esta clausura de la vía no ha provocado demasiados problemas de circulación en el centro de la ciudad. Tan sólo los primeros días los usuarios de los autobuses estuvieron despistados por la eliminación de las paradas de la Plaza Mayor. Por su parte, los coches se acostumbraron rápido a los itinerarios alternativos de Claudio Moyano y Miguel Íscar. La empresa ya ha abierto el paso de Montero Calvo, tal y como habían solicitado los comerciantes.
El proyecto prevé la ordenación de Duque de la Victoria en dos tramos. En el primero de ellos, entre Claudio Moyano y Regalado, está previsto dejar un solo carril de tráfico, con lo que ambas aceras podrán ampliarse un metro y medio cada una. En el tramo comprendido entre Regalado y Ferrari habrá dos carriles para tráfico. La reforma contempla la pavimentación total de las aceras, el cambio de todas las redes subterráneas, la colocación de bancos y de arbolado.
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