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ISABEL JIMENO
Miércoles, 7 de noviembre 2007, 02:01
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Tumbada, inmóvil, la imagen de la Mujer Muerta mira a Navas de Riofrío como el pueblo observa a uno de los puntos más conocidos, llamativos y emblemáticos de la sierra de Guadarrama.
A sus pies, antes del Palacio de Riofrío, se levantan las casas de un municipio con un encanto especial. Esa figura que no pasa desapercibida, objeto de miles de miradas, de montones de historias, de un sinfín de aventuras imaginadas, la Mujer Muerta es uno de los símbolos de la localidad, por eso en torno a ella surge la leyenda, una forma de explicar cómo la caprichosa naturaleza ha esculpido esa escultura en la sierra con forma de una dama tumbada que lleva años en la misma posición.
Cuentan en el pueblo que fue Hércules quien esculpió sobre las montañas la figura de esa mujer, una princesa asesinada por su padre. Dice la historia que la Mujer Muerta es la imagen de una bella dama, hija de un rey que tanto la quería que no soportaba la idea de perderla y que prefirió matarla antes que verla casada con un apuesto caballero.
Reza la tradición oral que aquel guapo hombre era quien acompañaba a Hércules en su viaje para fundar la ciudad de Segovia a través de la sierra de Guadarrama y que, al llegar al río Peces, a la altura de Navas de Riofrío, encontró a unas mujeres bañándose en sus aguas. Todas, excepto la princesa, salieron huyendo en busca de ayuda. Pero la fortaleza de Hércules y el caballero se impuso a los hombres llegados desde el palacio del rey, que se rindieron y el monarca decidió hospedarles en su castillo.
La tragedia
Ahí comenzó realmente la historia, la leyenda de la mujer muerta. Durante la cena, el caballero pidió la mano de la hija del rey que, aterrorizado por la presencia del corpulento Hércules, accedió, no sin mucho dolor, a cumplir sus deseos. Pero el monarca no podía hacerse a la idea de perder a la hija que tanto amaba y una noche, mientras el caballero y Hércules estaban en la ciudad, cogió a la princesa, la adentró en el bosque y allí la mató clavándola un puñal. Arrepentido con lo que había hecho, al volver a casa, el rey se encerró en sus aposentos y a los tres días murió de pena.
A su regreso para casarse, el caballero descubrió el luto por la muerte del monarca. Los cortesanos decían que fue de tristeza por la desaparición de la princesa en el bosque, por lo que el enamorado caballero decidió ir a buscarla entre los árboles. Y allí la encontró, muerta, apuñalada, con las manos entrelazadas sobre el pecho. Impresionado con la imagen, mandó a su acompañante, el rudo Hércules, que esculpiese sobre esas montañas la figura de la princesa fallecida para que nadie pudiera olvidarla. Y así, años y años, según cuenta la leyenda, estuvo Hércules hasta que moldeó la figura de la Mujer Muerta sobre la sierra, frente a las casas de Navas de Riofrío.Próximo pueblo: La Losa
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