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Carlos Prieto es agarrado por Petar Metlicic y Didier Dinart. / GABRIEL VILLAMIL
Ahogados en la orilla. Duishebaiev afirma que no volverá «a confiar en la palabra de Pastor»
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Ahogados en la orilla. Duishebaiev afirma que no volverá «a confiar en la palabra de Pastor»

El BM Valladolid pone contra las cuerdas al campeón, pero cae en el último minuto. La alineación de Prieto desata el enfado del entrenador del BM Ciudad Real

V. BORDA V. B.

Domingo, 7 de octubre 2007, 21:12

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El BM Valladolid nadó contracorriente en la segunda mitad. Mejoro su defensa, regaló menos balones, Sierra siguió siendo 'Supersierra' y el equipo creyó que podía tumbar al vigente campeón liguero. Estuvo cerca. Se tocaba con las manos, pero en el tramo final se dejó que el Ciudad Real tomase aire y solventase una papeleta que se le complicó en exceso después del descanso.

Y es que los hombres de Pastor demostraron una garra y unas ganas que contagió a la inflamable grada de Huerta del Rey. Llegaron a adelantarse en el marcador en dos ocasiones (23-22 en el minuto 46 y 24-23 en el 50), pero el Ciudad Real es mucho Cuidad Real. Los manchegos tienen un repertorio de recursos que son la envidia de cualquier entrenador que no sea Talant Duishebaiev. Zorman se echó el equipo a sus espadas y los llevó al triunfo ante la desesperación de los locales, que vieron cómo el balón se le caía de las manos Ávila en la jugada que podía suponer el empate a 28. Pero no fue así, y Davis sentenció en la jugada siguiente para poner en el electrónico el 27-29 con el que finalizó el choque. Ahogados en la misma orilla, en los últimos minutos de un partido que pudo haber tenido otro sino, pero que la adversidad y los errores locales dejaron escapar. La lectura positiva es que Huerta del Rey va a ser muy caro este año. Que se lo digan al Portland y también al Ciudad Real. El que no se consuela es porque no quiere.

El inicio del choque fue desigual. El BM Valladolid planteaba una defensa 6-0 con mucha profundidad en sus centrales y laterales, mientras que el conjunto manchego optaba por un 5-1 con el pegajoso Davis como adelantado. Los visitantes fueron abriendo sus primeras ventajas, pero el conjunto local respondió bien. Del 0-4 al 5-5. Pero ahí llegaron los problemas. El BM Valladolid comenzó a perder balones que dieron la opción de contragolpes de los extremos manchegos. En un visto y no visto, el conjunto de Duishebaiev endosó un 0-5 de parcial que había presagiar lo peor en Huerta del Rey. En esta ventaja, además de por los errores locales, tuvieron parte y culpa los colegiados, que se dedicaron a 'remar' del lado del poderoso. Por unas y por otras, la cosa es que el Ciudad Real parecía haber puesto la directa al triunfo. Y el agujero no se hizo más grande porque Sierra -diecisiete paradas en el partido, incluidos dos penaltis- mantuvo el tipo con intervenciones de indudable mérito.

Intercambio de goles

Cuando peor pintaba el partido, el BM Valladolid sacó la casta. La sangría se mantuvo en los cuatro o cinco goles de diferencia. En el tramo final de la primera parte se produjo un intercambio de goles del que salía favorecido el equipo manchego. Al menos, en los instantes finales anteriores al receso, el equipo local pudo dejar la ventaja visitante en tres goles (13-16).

En el descanso, Pastor les debió leer la cartilla a base de bien. Menos errores en los pases y en los lanzamientos, debió repetir hasta la saciedad el técnico. Y así fue. El BM Valladolid salió mucho más centrado. La defensa subió un escalón su intensidad y los problemas comenzaron a marcharse al otro lado del campo.

Muratovic salió desatado. El montenegrino se convirtió en el letal lanzador que acostumbra y que había olvidado en la primera parte -un solo gol antes del descanso-. El lateral balcánico le cogió la distancia a un Sterbik que había estado soberbio los primeros treinta minutos de juego. Uno tras otro fueron entrando los goles. Muratovic consiguió seis dianas casi de manera consecutiva en once minutos de juego. Muratovic, como no, ponía el 19-19 en el electrónico. El partido había cambiado de decorado y de protagonistas. También las intervenciones de Sierra -desesperó a Alberto Entrerríos- ayudó a que los locales volviesen a meterse en el encuentro.

Zorman

El tirón del BM Valladolid le duró hasta ahí. Mantuvo la solidez defensiva, pero el juego de ataque ya no fue tan fluido porque la defensa del Ciudad Real consiguió por fin atar en corto al efectivo lateral montenegrino. El marcador se movió en diferencias de uno o dos goles. Estaba todo tan ajustado que podía suceder cualquier cosa. El Valladolid llegó a mandar por un gol en un par de ocasiones, el Ciudad Real llegó a tener dos tantos de ventaja en otro par de oportunidades.

Pero el BM Ciudad Real tiene recursos para toda situación. Zorman, el central esloveno, tomó mando en plaza y decidió ir a por el encuentro. Un par de acciones individuales y consecutivas le dieron a su equipo ventaja (24-26). Quedaba tiempo para remontar. Y el BM Valladolid lo logró a trancas y barrancas. Igualó a 26 gracias Ávila y luego a 27. Pero hasta ahí llegó el BM Valladolid. Ya se veía la orilla y la posibilidad de al menos ganarle un punto al campeón, pero se perdonó al Ciudad Real y se pagó. Ahogados en la misma orilla. El empate quedó a una sola brazada. El BM Ciudad Real Había sido más listo en los instantes finales para decidir.Talant Duishebaiev entró en la sala de prensa con gesto serio. Estaba enfadado. El motivo era que Carlos Prieto había jugado el encuentro y Roberto García Parrondo no. El técnico del Ciudad Real aseguró que había llegado a un acuerdo verbal con Juan Carlos Pastor para que ambos jugadores, que fueron intercambiados este verano, no jugasen contra sus ex equipos.

El ex jugador internacional explicó que habían alcanzado ese acuerdo de palabra el pasado diciembre en la Copa Asobal celebrada en León. «Yo he mantenido mi palabra», dijo en tono serio. «No he sido yo el que ha roto ese acuerdo. Cuando doy mi palabra, lo intento cumplir. Hablé con Pastor en diciembre y no creo que se le haya olvidado al acuerdo que llegamos. Estoy dolido. No voy a volver a confiar en la palabra de Pastor. Desde ahora, todo por escrito. Ya puedo alinear a Roberto contra el Valladolid».

Pastor tenía una versión muy diferente de la controversia desatada por la alienación del pivote. El técnico vallisoletano indicó que es verdad que habló en León de semejante posibilidad, pero que no quedaron en nada. Posteriormente, cuando se decidió traer a Prieto, el entrenador del BM Valladolid determinó que fuese sin esa posibilidad. «Les dije a David Mato y al presidente que si no podía jugar todos los partidos, no lo quería en mi equipo. Entonces estábamos tras Laen, pivote ahora del Ciudad Real. Podíamos haberlo fichado por poco dinero. Por eso, fui muy claro: o Prieto juega contra el Ciudad Real o fichamos a Laen. Al final, el contrato no recoge esa posibilidad».

Dionisio Miguel Recio, por su parte, confirmó las palabras de su entrenador. Aseguró que el contrato de Prieto no refleja en ninguna cláusula que no pueda jugar contra su ex equipo. «Este club cumple con lo firma y así ha ha sido esta vez», concluyó el máximo responsable del club vallisoletano.

Ocasiones falladas

Por lo que respecta al choque, Pastor destacó que «hemos tenido la oportunidad de ganar al Ciudad Real gracias al trabajo realizado. Cuando vas 5-10 por debajo, lo normal es que pierdas. Una pena que hayamos creado ocasiones de gol y no hayamos sabido transformarlas. Ante los 'grandes' no se puede fallar, pues lo terminas pagando». Y así fue ayer.

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